¿En serio? Me haz jodido una de mis películas favoritas.

Blair Witch.


¿Alguna vez les ha pasado de sentir curiosidad ante cierta obra que proviene de cierto autor que les agradó en su momento o que es similiar a otra que les encanta? No es necesario responder, sé la respuesta. Bueno, a mí me ha pasado más de una vez, uno de los últimos ejemplos que podría nombrarles fue el sucedido con la banda Linkin Park ¿Por qué? Yo el último disco que había escuchado de Linkin Park fue en 2011, siendo el disco "A Thousands Suns", y cuando sucedió decidí marcar un punto y aparte con la banda, dejándola de escuchar completamente, a no ser de sus primeros trabajos de estudio, debido a la lejanía que tenía de la banda que en su momento me enamoró y al mismo tiempo que el nuevo trabajo que estaban realizando, en ese momento no me llenaba para nada —También tenía 12/13 años, era un tanto, por no decir totalmente, imbécil—. Así fue como no sabía nada de Linkin Park a menos que saliera a la luz alguna noticia sumamente relevante, yo seguí como si nada pero llegó el 2017 y un disco nuevo que causó revuelo, un estilo completamente nuevo dándole un giro de 180 grados a la banda. Cuando escuché los primeros singles me di cuenta que esa banda no me volvería a llenar nuevamente, por lo menos sus nuevos trabajos, así me alejé completamente de la banda. Si no hubiera sido por mi curiosidad, aún tendría una muy buena imagen de mi infancia y la banda en sí.

¿Por qué hablo de ésto? Porque me ha sucedido ahora al ver Blair Witch.

Comenzaré con la más notoria aclaración: Una secuela totalmente innecesaria.
Sí, sé que hay una segunda película pero eso no me importa, yo simplemente vi la original, la que vale para mí y para todo el público. Eso no importa ahora. Ésta película no viene al caso, debido a que si abordaban tal cual la primicia que se plantearon —La cual a mí gusto podría haber expandido todo lo que envuelve al Proyecto de la Bruja de Blair— podrían haber realizado un filme que daría un grano de arena al lore de la primera película pero trabajaría el terror de la misma manera, quedando obsoleta para éste tiempo donde la cámara subjetiva y grabada por los mismos actores ha sido usada hasta el cansancio —Debo aclarar que si la hubieran trabajado como la primera, con el miedo real de los actores, podría haber funcionado muy bien, hay que ser sinceros—. Entonces ahí queda la posibilidad de hacer las cosas como la original, la otra opción que se presenta es crear algo diferente, adaptándose a nuevos tiempos pero siendo reminisente a la obra del milenio pasado...

Lamentablemente no hicieron ninguna, brindando un producto vacío.

Sí, Blair Witch es un producto vacío, donde lo primero que puedo sacar a coladero es el aburrimiento y sueño que me brindó verla, incluso lo hice con mi hermana de 14 años, teniendo el mismo efecto sobre ella.

Siendo sincero, no me esperaba demasiado de la película, no tenía expectativas muy altas, es más, sabía que se iba a cagar de muchas maneras sobre la original pero nunca pensé que de tal manera. La película primeramente, no entiende a la original, una película donde se congenia con los personajes mediante el miedo. Entendiéndolos al verlos atados a una situación límite siendo totalmente vulnerables, conociéndolos en su máximo desnudez, la del miedo. No era necesario que nos den soliloquios lleno de una majestuosidad oral, ni que nos cuenten sus vidas, nosotros como espectadores nos llegamos a colocar en sus zapatos por la exposición que tienen, debido que la película se maneja como cintas encontradas, sentimos que cada grito, cada insulto y cada mirada de miedo es verdadera, provocando que cuando ellos respiran de manera agitada, sea nuestro respiro el que los acompaña. Ésto, Blair Witch, no lo entiende, no sabe cómo afrontarse a un sentimiento que no se puede fingir, dejando la línea de la sobre actuación y un miedo creíble muy delgada, siendo notorio en el guión como es parte de la primera, sumando que los actores no ayudan para nada. Caras de estupefacción, una cantidad de insultos que ya parecen que son por gusto, respiraciones tan abrumadoras que no son creíbles y un guión superficial a no más poder. Mientras que la primera no tenía casi guión, era completamente improvisada, supo transmitir mucho más.

La risa. No puedo creer que me haya causado risa en varios momentos de la película. La primera era sobre un documental que hacían tres jóvenes sobre la Bruja de Blair y la secuela trata sobre el hermano de uno de los protagonistas de la primera que decide buscarlo, así es como se hace un documental sobre esa búsqueda. El documental se lo pasan por los huevos, es una mezcla de incoherencias que se persiguen durante toda la película. Una de las que más me jodió fue la fiesta, sumamente innecesaria, joder... ¡JODER!

Aquí viene lo que más me duele hablar: El "Terror" de la película.

POR DIOS, ME CAGO EN TODO LO QUE SE MENEA.

Me he alterado, perdón.

Blair Witch se vuelca al terror actual, una bruja macabra, jumpscares a cada rato, secuencias en las que no se entiende nada más que una sobre actuación. Adapta todo el terror actual en una película que trataba de un terror ambiental, el entorno era lo que abrumaba, te abrazaba y no te dejaba salir ante nada, no era una Bruja largirucha que aparecía y te gritaba a tope, haciendo que te ríeras de la situación. Es una película que no da miedo y tampoco brinda sustos memorables, porque no me gustan los jumpscares en la películas de terror, son un recurso fácil pero los de ésta película ni siquiera te llegan a asustar.

No quiero hablar de ésta mierda.

No lo merece.

Disfrutad de la primera, no de ésta.

Os odio, Hollywood.

Comentarios

Entradas populares de este blog

¿El nuevo estandarte de los Spokon?

SHAFT (1971)

Good Job.